domingo, 29 de septiembre de 2013

PRESENCIA DE MAMÁ

Cuando papá y mamá se conocieron, ella era sacerdotisa en un templo de su pueblo natal en Japón.   Recién casados, papá aceptó el puesto de director de una de las oficinas regionales en Latinoamérica de la multinacional donde laboraba.  Al finalizar su contrato de trabajo, ambos acordaron radicarse en el país donde nacimos mi hermano mayor y yo. 
Hace cinco años mamá murió.  Papá estaba devastado y deprimido.  Su soledad se acentuaba más debido a que mi hermano y yo, luego de trabajar en los negocios de la familia durante el día, asistíamos a la universidad en la noche, regresando muy tarde.
Papá insistía en que no sentía la presencia de mamá ni en la casa, ni en su tumba.  Aseguraba que mamá había regresado al templo, que de joven, ella había abandonado por él.  Papá necesitaba estar cerca de mamá, así que volvió al pueblo de ella, para estar en su compañía.  Allí la siente en el viento, en cada campanada del templo, en cada árbol que florece, en cada ave que canta.
Mi hermano y yo decidimos volver al único lugar que conocemos como hogar, al lugar en donde nuestros recuerdos sienten la presencia de mamá.

martes, 13 de agosto de 2013

Pyrophorus

Este fin de semana acompaño a mi hermano mayor a inspeccionar los trabajos de mejoras que estamos haciendo en nuestra casa de campo. Como ingeniera civil, no podía negarme, a pesar de que eso significara no poder contactar a Karl durante los próximos dos días. 

Aunque traigo conmigo mi Tablet, aquí no tenemos señal, ni de celulares, ni de satélites, con ella solo puedo revisar los planos y especificaciones de las remodelaciones y anexos.

Es de noche y las luces de la casa, producidas por un generador, han atraído a una gran cantidad de insectos. Un cocuyo se posa en mi mano izquierda, sobreponiendo la derecha sobre él, creo una especie de jaula con mis manos. La oscuridad dentro de la improvisada jaula permite notar con mayor claridad el brillo verdoso de sus órganos fotógenos, me recuerdan los ojos verdes de Karl. Esos ojos que alegran mi corazón.
Susurro, acercando mis labios a mis manos, y confieso: “también estoy pensando en ti”.
Abro mis manos, quiebra su tórax, extiende sus alas y vuela hacia la oscuridad de la noche. 
¿Qué forma tomarán mis pensamientos al acercarse a él?


Con este micro relato participo en el blog de ESTA NOCHE TE CUENTO, para la convocatoria del mes de agosto: "Insectos".

lunes, 22 de julio de 2013

RESPUESTAS

Querido Karl:
¿Arrepentirme de haberte conocido? Preferiría no hacerlo.  La distancia que siempre nos ha separado, pudo suponernos el dolor que provoca la lejanía, el sinsabor de los reproches de amigos y familiares.
Cuatro mil kilómetros no parecen mucho cuando son sólo palabras.   Físicamente son un muro de responsabilidad, compromiso y seguridad.
¿Arrepentirme de sentir lo que estoy sintiendo? Preferiría no hacerlo.  Es un sentimiento no explorado antes y del que temo no volver a sentir por otra persona que no seas tú.   Ignoro si todo está fundado en algo real y tangible, o si es solo un sueño que añoro.
Todos me aconsejan, me advierten de los peligros de una relación a distancia como la que tenemos,  ¿lo hacen por mi bien o por su tranquilidad?
Podría decirte todo esto mientras conversamos esta noche, preferiría no hacerlo.  Cuando hablo contigo soy tan dichosa, que estos momentos de felicidad, prefiero no empañarlos con dudas.
La decisión, el riesgo, los obstáculos, son nuestros.   Ellos serán abatidos por nuestra honestidad, confianza y amor del uno por el otro.

Mi respuesta es no.  No me arrepiento de haberte conocido, de sentir lo que siento…y sí,  Si quiero compartir mi vida contigo.
Con este micro relato participo en el blog de ESTA NOCHE TE CUENTO, para la convocatoria del mes de julio: "Preferiría no hacerlo".

jueves, 4 de julio de 2013

TRAMPA

La penumbra solo nos permitía distinguir nuestras siluetas avanzando por el salón.  Una tenue luz se filtraba por el traga luz, intentando multiplicarse  al reflejarse en el espejo apoyado precariamente en la pared derecha del fondo.   Caminé hacia él,  acercándome con cautela, manteniendo mi guardia en alto y empuñando firmemente las dagas de doble hoja que llevaba en cada mano.
A medida que me acercaba, mi imagen en el espejo se desvanecía y sentía mayor atracción hacia él. 
- Karl, algo raro tiene el…
Quedé atrapada al otro lado del cristal.   Karl giró al notar que no terminé la frase, pero no me vio.   Comenzó a buscar a su alrededor, yo  trataba de salir por la misma vía por la que entré.  Era imposible.
La habitación absorbía mi energía rápidamente.  El pánico se apoderaba de mí.  
Desesperadamente, Karl trataba de buscar algún mecanismo que lo llevara al lugar a donde me encontraba atrapada.   Con su espada partió el espejo en añicos, liberándome de mi encierro.   Pero, ya era demasiado tarde, mi energía vital solo duraría dos segundos: “Game Over”.
Ahora tendremos que iniciar nuevamente el nivel 25.  Ya sabemos que el espejo es una trampa.
-Te llamo mañana Karl, que descanses.

Con este micro relato participo en el blog de ESTA NOCHE TE CUENTO, para la convocatoria del mes de junio: "En el Espejo".

NO ES TRISTEZA...

Al mirar por la ventanilla del avión, a medida que ascendemos, veo la terminal aérea de Toronto empequeñecer. Karl, mi amigo por internet, quedó allí. No pude evitar que se escapase una lágrima cuando se despidió:
“Temo mucho no estar a la altura de mi compañera de batalla. En el videojuego, personificando a la Princesa Karuna, eres astuta, intuitiva, osada, de movimientos gráciles, asertiva... Yo solo soy la fuerza bruta que sigue tus órdenes, neutralizando los enemigos de cada nivel, mientras tú descifras los acertijos y localizas los trofeos que nos permiten avanzar. Eres igual a tu personaje, eres real, eres hermosa.
No quiero perderte. Haré todo lo posible para estar a tu nivel, para ser tu compañero en las batallas de la vida real. Eres mi princesa, prometo que lucharé por volver a estar juntos. Hasta entonces, no permitas que tu corazón se entristezca, pues me harás sufrir.”
Vuelvo a mi realidad, en un vuelo comercial de vuelta a casa. Mi familia, de origen asiático y tradicionalista (cuando conviene) no estará muy feliz con esta relación.
Espero que Karl me perdone, no estoy triste sino preocupada. Por esta princesa tendrá que enfrentar muchas batallas… algunas le harán sufrir.
Con este micro relato participo en el blog de ESTA NOCHE TE CUENTO, para la convocatoria del mes de mayo: "Qué le pasa a la Princesa?"

CABALLERO AL RESCATE


Llegué al restaurante en el 2084 de Old Lakeshore en Burlington. Allí estaba Karl con esa sonrisa tierna y sincera, que a diario veo en la pantalla de mi computador. Después de dos años de amistad en línea, a través de un videojuego, donde iniciamos como rivales, y nos convertimos en aliados para terminar como amigos; estamos por primera vez cara a cara.
Al verme llegar, se levantó, se acercó a mí, sujetó mi brazo izquierdo y me besó la mejilla.
- Princesa Karuna – me llamó por mi nombre de usuario en el videojuego. Deslizó su mano por mi brazo y entrelazamos nuestros dedos. Su beso palpitaba cálido en mi rostro.
- Caballero de Plata – Sonreí al apuesto rubio de ojos verdes y destellos dorados que me invitaba a seguirlo a una terraza detrás del local con vista al Lago Ontario.
Desayuno exquisito, conversación amena, una velada colmada de detalles y atenciones… A media mañana me presentó a uno de sus amigos.
-Mi amigo Rayner es el Caballero Negro que venciste en el nivel 8.
Sus seductores ojos azules me han hechizado, sembrando dudas en mi corazón.
Sagaz, mi Caballero de Plata me obliga a mirarlo y me rescata, liberándome del encantamiento.
Con este micro relato participo en el blog de ESTA NOCHE TE CUENTO, para la convocatoria del mes de abril: "Caballeros".

SIGUIENTE NIVEL

Hace dos años establecí una amistad muy curiosa con Karl.  Lo conocí en una página de juegos en línea.  Pronto Nos hicimos rivales en torneos en los que, pasado  un tiempo, no permitíamos a más competidores en nuestras sesiones, solo él y yo.  
El intercambio de correos y charlas en línea nos acercó a tal punto que no había un día en que no recibiéramos, por lo  menos, un correo electrónico del otro.   Las sesiones de charlas en línea se hacían más frecuentes y nos obligábamos a coincidir en nuestros horarios para ello.

Hoy tengo la oportunidad de conocerlo en persona.   La empresa en la que laboro me ha enviado como su representante a un congreso en Ontario, Canadá, y tengo el día libre.

Súbitamente un escalofrío ha recorrido todo mi cuerpo, mis rodillas y  manos permanecen temblando.    Y… Si no le agrado?... Si él no me agrada?… Si sus modales me son repulsivos?... y Si no soy de su tipo?...Si no llenamos las expectativas que tenemos el uno del otro?

Este puede ser nuestro último torneo.   Hasta oprimir "Play", no sabré si pasamos al siguiente nivel.

-          Taxi!!!   To 2084 Old Lakeshore Road at Burlington.

Con este micro relato participo en el blog de ESTA NOCHE TE CUENTO, en la convocatoria del mes de marzo 2013. Tema: 2084